Sinopsis
En escena está consuelo, la querida compañera del autor. Está dibujando, mira sus dibujos y piensa. Él se le aparece (así como a Saint-Exupéry se le apareció el Principito) y empieza a contar su mágico encuentro. Ella lo guía con su voz y su presencia. Van construyendo entre dibujos y relatos. El escenario se llena de papeles, juegos y recuerdos. Vemos pasar todos los personajes del cuento, los mismos que nos invitan a hacer un viaje emotivo y que, junto con los dos narradores, nos llevarán a todos a revivir la aventura del Principito.
La puesta en escena
Decidimos contar esta historia, tan conocida y tan leída, de una manera que nos aportara algo más, algo diferente, pero sin alejarnos del original. El Principito es una historia extremadamente delicada. Enseguida optamos por utilizar los dibujos originales porque consideramos que son inseparables del texto y que solo ellos representan al auténtico principito. De esta forma el papel se ha convertido en el elemento principal de la escenografía y de paso de todo el espectáculo.